La palabra llamada “responso” proviene un sustantivo del latino “responsum” y su significado es “respuesta”.  en la religión católica, llamamos un responso a la oración por los difuntos que se realiza cuando estamos velando a los seres queridos entre el fallecimiento y el entierro o cremación

El objetivo de la oración es dar consuelo y acompañar a la familia del difunto.

¿Quién debe realizar un responso?

Un responso, debe ser realizado por:

• Sacerdotes católicos.
• Diáconos ordenados por la Iglesia.
• Ministros autorizados de forma extraordinaria por la autoridad eclesiástica.

Aunque los laicos también pueden dirigirse a los presentes en el responso, pero con sus propias palabras, sin utilizar oraciones canónicas, siempre desde el respeto y el cariño. Es bastante habitual que los familiares muy cercanos o amigos íntimos digan unas emocionadas palabras en recuerdo del ser querido.

¿Cómo se hacer un responso?

Lo más habitual es iniciarlos con una oración del Santo Rosario, según sea el deseo de los familiares. A continuación, podemos pasar a la “Liturgia de las horas”, o conocida como “Oficio de difuntos”.

Esta liturgia comenzaría santiguándonos con la señal de la cruz para luego continuar con siguientes pasos:

• Monición: se trata de la introducción al acto religioso con un texto corto.
• Oración colecta: esta es realizada por el sacerdote, diácono o ministro.
• Lectura de la Palabra de Dios:  aquí podemos leer mensajes bíblicos por el representante de la Iglesia o por algún allegado del fallecido.
• Oración de los fieles:  llamada también como la oración universal, realizada por el sacerdote y respondida por los fieles presentes en el responso.
• Responso final: en esta parta se hablará del difunto de una forma más personal, recordando las buenas obras que ha realizado en este mundo, en todo el amor que se lleva y en el recuerdo permanente que en los allegados

¿Dónde se debe hacer el responso?

El responso no debemos confundirlo con la misa oficial por la salvación del alma del finado. Este acto puede realizarse en el domicilio ,en el velatorio o en el momento del entierro, siempre contando con la expresa aprobación de la familia del fallecido.

Cuando son realizados en velatorios,  o entierros, es bastante habitual que el féretro esté rodeado de flores funerarias que los asistentes han enviado en señal de respeto y condolencia. Es por que en el responso se incluyan algunas palabras de agradecimiento a todos quienes expresaron el pésame y condolencias en forma de flores a la familia.

La tradición de las flores funerarias en los entierros o velatorios actualmente en tanatorio se remonta posiblemente a tiempos prehistóricos.

Es una forma de despedir a los seres .La forma redonda de las coronas funerarias simbolizan el llamado ciclo de una vida que nunca se acaba.

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